La película se hace necesaria por cuanto este ejercicio de memoria constituye la búsqueda de una verdad (histórica y personal), de un origen y de un trayecto que se pueda ofrecer como legado. Hay aquí algo propio del cine y sus principios fundamentales. Razón de más para verla.
Del artículo de Fran Benavente en CAHIERS DU CINEMA ESPAÑA de Noviembre.
No importa el fracaso ni el éxito, sino haber traspasado de parte a parte un solo corazón.
Jean Cocteau
martes, 11 de noviembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario